- EL UNIVERSO -
Cuando un ecuatoriano afincado en España retorne al país y quiera cobrar una pensión de jubilación no perderá las aportaciones hechas en la Península. Todo lo contrario. Se sumarán a las que haya efectuado en Ecuador. La totalización de los periodos de cotización acreditados en cada una de las partes permite que los pensionistas (ecuatorianos o españoles) cumplan con el tiempo mínimo requerido para beneficiarse de la prestación una vez que decidan jubilarse. Para calcular el monto se sumarán las pensiones parciales y éste guardará relación con la edad del beneficiario y el tiempo de aportes. Esta es una de las principales ventajas del convenio de Seguridad Social que el canciller Ricardo Patiño presentó el fin de semana en Madrid, Barcelona y Murcia.
En ningún caso constituye el primer acuerdo suscrito sobre esta materia entre Ecuador y España. El primero se firmó el 1 de abril de 1960 (se añadió un Protocolo Adicional en 1974). Los cambios producidos en las legislaciones de ambos países empujaron a sus autoridades a negociar y consensuar un nuevo documento. Las conversaciones arrancaron en 2007 y solo se alcanzó un acuerdo en septiembre de 2009. Su firma se celebró tres meses después. No fue el último escollo. Recién en julio pasado se suscribió el Acuerdo Administrativo para la aplicación del texto legal.
El documento contempla el acceso a las prestaciones contributivas por maternidad, supervivencia, accidentes de trabajo, incapacidad temporal y permanente, enfermedades profesionales y auxilio por defunción.
“Se ha hecho un convenio que no se había hecho nunca. Antes se les robaba la plata a los ecuatorianos y a los españoles” llegó a declarar en Madrid el presidente del Directorio del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Ramiro González, después del concierto que organizó el Gobierno de Rafael Correa para difundir su contenido.
Luego de este primer acto de lanzamiento, funcionarios del IESS capacitarán al personal consular y a funcionarios de la Senami (se contempla extenderlo a dirigentes de asociaciones) para que resuelvan las dudas de los inmigrantes. En Ecuador se instalará una oficina para atender las demandas de los ecuatorianos que retornan y pueden beneficiarse del convenio. En la actualidad 144.106 connacionales cotizan a la Seguridad Social española.
En enero (último dato disponible), 10.147 españoles aportaban en Ecuador.
Cuando un ecuatoriano afincado en España retorne al país y quiera cobrar una pensión de jubilación no perderá las aportaciones hechas en la Península. Todo lo contrario. Se sumarán a las que haya efectuado en Ecuador. La totalización de los periodos de cotización acreditados en cada una de las partes permite que los pensionistas (ecuatorianos o españoles) cumplan con el tiempo mínimo requerido para beneficiarse de la prestación una vez que decidan jubilarse. Para calcular el monto se sumarán las pensiones parciales y éste guardará relación con la edad del beneficiario y el tiempo de aportes. Esta es una de las principales ventajas del convenio de Seguridad Social que el canciller Ricardo Patiño presentó el fin de semana en Madrid, Barcelona y Murcia.
En ningún caso constituye el primer acuerdo suscrito sobre esta materia entre Ecuador y España. El primero se firmó el 1 de abril de 1960 (se añadió un Protocolo Adicional en 1974). Los cambios producidos en las legislaciones de ambos países empujaron a sus autoridades a negociar y consensuar un nuevo documento. Las conversaciones arrancaron en 2007 y solo se alcanzó un acuerdo en septiembre de 2009. Su firma se celebró tres meses después. No fue el último escollo. Recién en julio pasado se suscribió el Acuerdo Administrativo para la aplicación del texto legal.
El documento contempla el acceso a las prestaciones contributivas por maternidad, supervivencia, accidentes de trabajo, incapacidad temporal y permanente, enfermedades profesionales y auxilio por defunción.
“Se ha hecho un convenio que no se había hecho nunca. Antes se les robaba la plata a los ecuatorianos y a los españoles” llegó a declarar en Madrid el presidente del Directorio del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Ramiro González, después del concierto que organizó el Gobierno de Rafael Correa para difundir su contenido.
Luego de este primer acto de lanzamiento, funcionarios del IESS capacitarán al personal consular y a funcionarios de la Senami (se contempla extenderlo a dirigentes de asociaciones) para que resuelvan las dudas de los inmigrantes. En Ecuador se instalará una oficina para atender las demandas de los ecuatorianos que retornan y pueden beneficiarse del convenio. En la actualidad 144.106 connacionales cotizan a la Seguridad Social española.
En enero (último dato disponible), 10.147 españoles aportaban en Ecuador.
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